Streuselkuchen (de manzana)

Esto es, seguramente, lo primero que aprendí a cocinar. A los cuatro o cinco años miraba como mi madre (alemana) preparaba esta deliciosa receta y creo haber hecho uno por mí misma no mucho después. Es perfecto para todo momento en el que se necesite algo simple y delicioso, dado que es rápido y también bastante barato. Cuando visité Alemania, descubrí en casa de mi abuela que también existe una versión de este kuchen con membrillo, el cual queda también exquisito. Tengo pensado en algún momento intentar con esta fruta y compartirlo, además de otras variaciones como el de ciruelas (este, el de manzana y el de membrillo son distintos a los kuchenes que se preparan con frutas frescas, porque el kuchen entra al horno con las frutas ya distribuidas sobre él), el cual es el segundo que aprendí a preparar y gracias a ese sabor ácido queda inigualable. Además, el de ciruelas no necesita streusel/miga para ser perfecto. La próxima vez que prepare uno, sacaré las fotos debidas para hacer el paso a paso. Pero, por ahora, aquí está la receta.

Ingredientes:

• 250g de harina
• 125g de margarina o mantequilla
• un huevo
• 65g de azúcar normal o rubia
• una cdta de esencia de vainilla o ralladura de naranja
• una cdta de polvos de hornear
• cuatro manzanas verdes grandes
• una cdta de canela

para la miga:

• 200g de harina
• 125g de margarina o mantequilla
• 100g de azúcar

Preparación:

1. Realizar la misma preparación de la masa de kuchen báscica que menciono en Receta básica Kuchen de fruta. Reservarlo en el refrigerador y precalentar el horno a 170º C.
2. Pelar las manzanas y cortarlas en octavos. Cocinarlas en una olla con agua, un poco de azúcar y canela hasta que estén blandas y escurrir el agua. 
3. En una fuente mezclar el harina, la mantequilla y el azúcar. Amasar de tal forma que se formen pequeños grumos.
4. Poner la masa en el molde y agregar las manzanas de la manera que más nos guste (yo normalmente hago primero un círculo grande pegado a los bordes, otro mediano y en el centro el más pequeño). Finalmente esparcir los grumos o streusel (en alemán) sobre las manzanas y hornear durante 30-40 minutos.
5. Una vez horneado es preferible dejarlo enfriar antes de servir. En Alemania suelen acompañarlo con crema batida.